España es un país que respira cultura en cada esquina. Ciudades como Madrid, Barcelona, Toledo y Salamanca son auténticos museos al aire libre, donde la historia se mezcla con la modernidad. Caminar por sus calles es viajar en el tiempo, admirando monumentos, plazas y catedrales que reflejan siglos de arte y tradición.
En Madrid, el Museo del Prado y el Palacio Real son visitas obligadas. En Barcelona, la Sagrada Familia y las obras de Gaudí te dejarán sin palabras. Mientras tanto, Toledo —la ciudad de las tres culturas— ofrece una atmósfera mágica donde convivieron cristianos, judíos y musulmanes.
Más allá de los monumentos, el turismo cultural en España también se vive en sus fiestas, gastronomía y tradiciones locales. Participar en una feria, degustar tapas o asistir a un concierto de guitarra española son formas de conectar con el alma del país.
